La Teoría Del Caos, Entre “Conspiracionistas” y Escépticos.

La Teoría Del Caos, Entre “Conspiracionistas” y Escépticos.

“Desde los días de Espartaco-Weishaupt hasta los de Karl Marx, hasta los de Trotsky, Bela Kun, Rosa Luxembourg, y Emma Goldman, esta conspiración mundial para derrocar a la civilización y reconstruir la sociedad sobre la base del desarrollo atrofiado, de la maldad envidiosa y de la igualdad imposible, ha crecido sostenidamente. Jugó un rol definitivo y reconocible en la tragedia de la Revolución Francesa. Ha sido el motivo principal de cada movimiento subversivo durante el siglo 19, y ahora al fin, esta banda de personalidades extraordinarias del submundo en las grandes ciudades de Europa y América han tomado al pueblo ruso por su cabello, y se han convertido prácticamente los maestros indiscutidos de ese enorme imperio.”

Winston Churchill de febrero de 1920, en un artículo que apareció en el Illustrated Sunday Herald

El concepto de conspiración asusta a algunas personas, hasta el punto de que están dispuestos a pasar por alto cualquier y toda evidencia de que los acontecimientos mundiales son en su mayor parte “dirigidos”. 

La burla de las teorías de la conspiración en la prensa y en los medios occidentales se basa en el argumento simplista de que la razón está del lado del gobierno y de la burocracia, y no al margen de la sociedad y la civilización. 

Los refutadores de la conspiración afirman ridículamente que los teóricos de la conspiración son presa de la paranoia y el pensamiento irracional sin explicar su razonamiento defectuoso propio, siempre recurriendo al mismo “caballo de batalla”, la navaja de Occam .

Ellos argumentan que la teoría afirma que la "explicación más sencilla" suele ser la correcta para cualquier problema o crisis en particular, pero la navaja de Occam lo que en realidad se debería observar, es que la explicación más simple debe estar acorde con la evidencia disponible, para que la respuesta sea correcta para cualquier problema dado. 

Es decir, la explicación más simple debe estar conforme a la evidencia, en caso contrario, es muy posible, que la explicación no sea correcta.

Por desgracia, "escépticos" de la “conspiración dirigida”, suelen hacer la vista gorda a la evidencia, que es contraria a sus explicaciones simples, pero siguen enérgicamente el argumento de que la simplificación es su propia reivindicación. 

En otras palabras, ellos no sienten la necesidad de defender su visión de un mundo simplista, ya que, en sus mentes, la sencillez destaca como evidente. 

Hubo un tiempo en que los hombres creían que los planetas giraban alrededor de la tierra y que estaban unidos por cadenas largas de vidrio, y esto fue evidente para ellos, porque era la explicación más simple que pudiera ocurrir. El pensamiento de los escépticos del nuevo orden mundial y la globalización concertada es muy parecido a éste.

El argumento más común que tienden a explotar es que el mundo es demasiado "caótico" y que si las élites en realidad están buscando un sistema de un mundo totalmente centralizado, este está "fracasando miserablemente" debido a que muchas culturas son tan claramente divididas y distintas.

Para cualquier persona que sostiene este argumento tan “lógico y práctico”, en primer lugar yo sugeriría que mirar más allá de la superficie de los diversos conflictos en las similitudes entre estos llamados "enemigos", para darse cuenta de la realidad.

Por ejemplo: 

¿Qué pasa con las diferencias entre Estados Unidos y Rusia? Estas dos naciones tienen una larga historia de las ideologías opuestas y se han acercado a los tiempos de guerra una y otra vez. 

Ciertamente, los estadounidenses promedio se ven a sí mismos como individualistas y a los rusos como socialistas o comunistas; y el promedio de los rusos ven a los estadounidenses como imperialistas capitalistas y se ven a sí mismos como humanistas. 

Pero ¿qué pasa con sus respectivos gobiernos? ¿Qué pasa con sus respectivos financieros y los oligarcas? Se ven realmente como enemigos?

Si esto fuera así, entonces ¿por qué magnates estadounidenses de Wall Street y la ayuda militar de Estados Unidos a la Revolución Bolchevique en 1917?

Un falso paradigma fue creado cuando internacionalistas apoyaron la revolución bolchevique y permitieron que Rusia se convirtiera en un país comunista.

La Guerra Fría eventual que resultó creó el criterio y refuerzo del complejo militar-industrial, para construir un ejército masivo (que no forma parte de la Constitución de Estados Unidos), un ejército que luego podría ser enviado en todo el mundo para someter a diversas naciones e incluso, posiblemente, ser utilizada para oprimir al pueblo estadounidense.

Incluso hoy en día, el falso paradigma Este / Oeste continúa, con un América pintado como el villano torpe y Rusia pintado como el incondicional objetor razonable. 

Sin embargo, altos funcionarios del gobierno de Rusia y altos cargos Estadounidenses trabajan de cerca y responden a las mismas élites financieras internacionales, como el Fondo Monetario Internacional y el Banco de Pagos Internacionales.

Ahora, entrando en acontecimientos más actuales, cuando los EE.UU. entraron en operaciones militares contra los “insurgentes” de ISIS que se mueven rápidamente a través de las regiones del norte de Irak y Siria.

Entonces cabe razonar: si ISIS es el enemigo, ¿Porque los EE.UU. y su aliado, Arabia Saudita, apoyaron el entrenamiento de agentes de ISIS en Siria y en Irak?

¿Es sólo la ironía del destino, que los E.E.U.U ayudaran a ISIS y ahora la Casa Blanca este en “guerra” con el grupo? ¿O es posible que tal vez, sólo tal vez, un plan mayor este en marcha?

Como cuando el siniestro jefe de Gabinete de Barack Obama Rahm Emanuel dijo la famosa frase: "Uno nunca debe desperdiciar una crisis. Y lo que quiero decir con esto es que la crisis es una oportunidad para hacer cosas que piensas, que no se podía hacer antes”.

Si una crisis de oportunidad no se presenta en el marco de tiempo que se necesita, ¿por qué no diseñar una crisis para satisfacer sus objetivos? 

Esta es una táctica que ha sido utilizada por las élites por generaciones, y se llama dialéctica hegeliana.

La obra de Georg Wilhelm Friedrich Hegel fue el fundamento mismo de la ideología colectivista / socialista, e inspiró a Karl Marx durante su redacción de El Manifiesto Comunista.

Para Hegel, nuestro mundo es un mundo de razón. El estado tiene la Razón Absoluta y el ciudadano solo puede ser libre complaciendo y obedeciendo al estado. Hegel llamaba al estado “la marcha de Dios en el mundo” y el “último fin”, a este respecto decía: “el Estado tiene derecho supremo contra el individuo, cuyo supremo deber es ser miembro del Estado”… “El espíritu del mundo está por encima de todos los privilegios especiales."

En su teoría dialéctica, Hegel conjuró una estrategia mediante la cual las élites y el establecimiento pueden controlar a las masas a través de la división creada deliberadamente. 

Para definir el método de la dialéctica hegeliana, simplemente, el cuerpo gobernante debe activar primero un problema o crisis, que hace que la ciudadanía reaccione con miedo y exija una solución, los gobernantes a continuación ofrecen una solución, que ya habían predeterminado antes de que hubiese comenzado la crisis; esta solución generalmente implica más poder para las élites y menos libertad para los ciudadanos.

El mundo parece dividido y caótico, precisamente porque se ha hecho de esa manera, por unos pocos elegidos en el establecimiento globalista. 

De hecho, si tuviéramos que nombrar cualquier guerra ocurrida durante los últimos 100 años, cualquier analista competente, de carácter alternativo, le sería muy fácil obtener pruebas irrefutables de la participación de los bancos internacionales y grupos de reflexión, tirando de las cuerdas de estos acontecimientos.

La Ingeniería Del Caos

La ingeniería del caos sirve para varios propósitos, proporcionando la distracción y la cubierta para que las élites implementen planes que no son de dominio popular.

También proporciona una cabeza de turco para las masas, siempre se necesita un “villano de turno” fácilmente identificable, que implemente los cambios violentos que producen consecuencias destructivas; ya que, estando la población divida estas alteraciones de la reglas de juego, son más fácilmente aceptadas.

Ciertos cambios globalistas que se requieren hacer, funcionan mediante la cuidadosa explotación de cabezas de turco.

Por ejemplo, los globalistas en el FMI han estado discutiendo el establecimiento de una moneda global durante años para reemplazar al dólar estadounidense.

Rusia y el Medio han también, convenientemente, estado pidiendo el FMI para reemplazar al dólar con sus Derechos Especiales de Giro (DEG).

Y, por último, así como convenientemente, las élites en el gobierno de Estados Unidos han puesto en marcha un golpe de estado controlado en Ucrania e inició la confrontación económica directa con Rusia, lo cual daría al este de la excusa perfecta para deshacerse del dólar estadounidense como reserva mundial y reemplazarlo con otro sistema de moneda en el FMI. 

A pesar de las afirmaciones de que Vladimir Putin es "anti-globalista", el ruso es, de hecho, un ávido partidario del FMI, y ha declarado que su objetivo es continuar con el FMI, pero con unos miembros de Rusia con una mayor capacidad de poder de decisión:

“En el caso de los BRICS vemos todo un conjunto de coincidentes intereses estratégicos. Primero que nada, se trata de la intención de todos de reformar el sistema internacional financiero y monetario. En su forma actual, es injusto con los países del BRICS y en general con las nuevas economías. Debemos lograr una participación más activa dentro del sistema de toma de decisiones del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial. El sistema monetario internacional depende mucho del dólar, o para ser más precisos, de la política financiera y monetaria de las autoridades norteamericanas. Los países del BRICS deseamos cambiar esta situación.”

Sí, Vladimir, y también lo hacen los ingenieros sociales de manipulación en el FMI.

Es así, como usted tiene la sensación de ver cómo funciona esto: problema, reacción, solución. 

La guerra económica o física se puso en marcha entre el este y el oeste, mientras que el dólar se mata en el proceso, las masas reaccionan exigiendo un reemplazo justo y equilibrado para el dólar como reserva mundial de modo que la estabilidad económica pueda regresar. 

Los estadounidenses culpan a Rusia y el este de su desgracia fiscal, el Este culpa a la arrogancia de Occidente por su propia caída. 

Ninguna de las partes culpa a los banqueros, que comenzaron toda la calamidad, para empezar, y las élites se lanzan en picado como salvadores con un nuevo acuerdo al estilo de Bretton Woods para apaciguar ambos lados y consolidar su sistema de moneda global, el sistema que siempre habían querido; buscando más que nunca la moneda mundial, para afianzar su autoridad monetaria y la gobernanza global (orden en el caos).

Este proceso es más psicológico que político en sus objetivos, e podría argumentar que si las élites ya tienen el control de todos los bancos centrales y los gobiernos, entonces ¿por qué se necesita un gobierno mundial? 

La respuesta es que estos hombres no quieren un gobierno global secreto, que quieren abrir gobierno global a la vista de todos; ellos quieren que aceptemos la idea como un hecho de la existencia, porque sólo cuando estamos de acuerdo en participar en la mentira habrán ganado realmente.

El resultado final de la Primera Guerra Mundial fue la creación de la Sociedad de las Naciones, y el mensaje claro, fue que la soberanía conduce a la desunión y la catástrofe; la Segunda Guerra Mundial llevó a la creación de las Naciones Unidas y el Fondo Monetario Internacional. 

Creo que una tercera guerra mundial está casi sobre nosotros (si no se está librando ya de forma solapada), uno podría decir que las armas de destrucción monetaria son más potentes que las armas de destrucción masiva. 

Cada supuesta desintegración de la unidad global finalmente ha dado lugar a una mayor centralización, y esto es algo que los escépticos parecen olvidar. 

La progresión de la crisis sugiere que la próxima guerra conducirá a la globalización total bajo la dominación de una minoría de elitistas se hacen pasar por "sabios iluminados", que sólo desean traer paz y armonía a las masas. 

Mientras tanto, los escépticos continuarán debatiendo sin pensar, y dirán que todo este asunto fue una casualidad, un acto de opciones matemáticas al “azar” (Si el mismo dios que tanto propugna la ciencia), y no nos dirán que "casualmente" lo único que los reales gobernantes del mundo anhelan es: Un gobierno Totalitario Global.